Comprobado cientificamente: los conocimientos se olvidan

¿Tu también tienes la percepción de olvidar los contenidos lo que aprendiste en la escuela y que no continuas utilizando? En realidad ya hay estudios de investigación sobre ello.

Uno, realizado en el 2008, y publicado en The Journal of Marketing Education, prueba que los estudiantes olvidan la mayor parte de los conocimientos antes de que pasen 2 años desde que han demostrado en exámenes su adquisición: quienes han tenido muy buenas calificaciones olvidan mayor proporción de conocimientos “aprendidos” (olvidaron un 68%) que los que tienen peores calificaciones (59%).

A la vista de estos resultados, ¿merece la pena centrarse tanto en los contenidos o es más útil y práctico enseñarlescapacidades que no se olvidan? Por ejemplo, pensar con eficacia, comunicar y presentar ideas, desarrollar su creatividad, mejorar la capacidad para emprender proyectos, identificar problemas reales y platearse aportar soluciones,....

Hay que mojarse ¿En qué utilizar el tiempo de aprendizaje: en contenidos (se olvidan de manera masiva) o en competencias básicas, que nunca olvidarán?

Cómo seleccionar el talento y la pasión

Este interesante libro da un montón de ideas chulas sobre cómo habría que seleccionar los profesores que la sociedad del siglo XXI. Y, ¡qué sorpresa!, no se parece en nada al actual sistema de oposiciones a profesores y maestros. 

Lo importante es lo que sabes hacer

En la sociedad, la vida y la economía ya no te valoran por lo que sabes. Ya tenemos a Google que lo sabe casi todo. Te valoran por lo que eres capaz de hacer con lo que sabes.

¿Fui importante en tu vida?

Como profesor, no quiero enseñarte cosas que no te puedan ser útiles fuera de la escuela, que no te ayuden a encontrar tu rumbo en la vida, que no te capaciten para creer en ti mismo.

Creo que todos los chicos tienen derecho a tener algún adulto que jamás se dé por vencido con ellos y les insista para se conviertan en las mejores personas posibles. Todos tienen derecho a ser entendidos y a que les ofrezcan programas orientados a sus intereses, un tipo de educación influya en sus vidas.

Hacer que los estudiantes creen algo con valor.

Uno de los objetivos de las clases debe ser explorar las posibilidades de crear cosas. Lo prioritario debe ser la iniciativa, la capacidad para emprender proyectos, ya sean sociales o personales, de obtener un producto concreto que sea valioso:

1. Deberíamos focalizar las clases en la iniciativa de los estudiantes, enseñarles a observar oportunidades y a utilizar su imaginación y creatividad para generar nuevas ideas y soluciones, servicios, productos….
2. Centrarse sólo en programas académicos y teóricos  (saturados de contenidos) generan ciudadanos conformistas y pasivos, sin espíritu de iniciativa y de mejora. Enseñar solo conocimientos acaba con la motivación de los alumnos y la ilusión de los profesores. 

El ineficaz sistema de selección de profesorado

¿Qué es más importante: seleccionar el personal docente de las próximas décadas o dirigir un centro educativo? ¿Cuál de las dos funciones tiene más transcendencia y mayor efecto multiplicador en la calidad del sistema educativo?

La respuesta es casi inmediata... seleccionar el personal docente de las próximas 3 decadas: ninguna duda, porque afecta a todos los estudiantes de forma más directa y durante mucho más tiempo.

Para ser director de centro escolar te exigen una formación extra y varios años de experiencia; para participar en un tribunal de oposición no, aunque en tus manos esté la responsabilidad de elegir los profesores que educarán a las generaciones de los próximos 35 años.  

Seleccionar profesores es una tarea extremadamente compleja: tienes que dominar conceptos muy alejados del día a día docente como qué necesitará la sociedad y la economía en el futuro, cuáles son las cualidades de profesor del siglo XXI y cómo evaluarlas, si los candidatos saben motivar, innovar o diseñar entornos de aprendizaje, qué perfil sicológico y emocional debe tener un candidato a profesor.…

Y los tribunales no son especialistas en estos temas. Parece claro que docentes elegidos tendrán el mismo perfil y características que los profesores actuales: los nuevos profes replicarán el sistema actual, que los especialistas califican de desfasado y poco útil.  El sistema educativo, muy complejo y con gran necesidad de adaptación a lo cambios sociales y económicos, selecciona personal para "no cambiar".

Y para colmo las pruebas de las oposiciones son, por decirlo suavemente, manifiestamente mejorables.

Los especialistas en educación aseguran que la enseñanza ya no debe ser memorística, que no debe estar basada en contenidos sino en el desarrollo de competencias. No obstante, las pruebas de oposición van justo en en dirección opuesta: para desarrollar un tema, solo necesitas recordar un montón de contenidos: no tienes que demostrar que sabes motivar, que tienes creatividad para resolver situaciones reales de aprendizaje, que sabes orientar o seducir a tus alumnos con buenas preguntas o que conoces cómo plantear y sugerir buenos proyectos. Básicamente las pruebas evaluarán tu memoria.

Si ya hay un acuerdo entre especialistas en educación en que las clases magistrales ya no tienen sentido, ¿por qué las pruebas para discriminar quien será o no profesor en los proximos decenios consisten en "exposiciones académico/magistrales"?

Y no es que a estas alturas no se sepa cómo hacer la selección del profesorado: Finlandia, lo lleva haciendo años, sólo hay que copiar el método.

Ser buen profesor conocer las mejores prácticas docentes

Como sociedad no admitiríamos que los médicos no actualizaran sus conocimientos, que no estuvieran a la última en los procedimientos y métodos a aplicar. Sin embargo somos mucho más condescendientes con los docentes.

 En un mundo que cambia muy rápido los profesores tenemos que autoexigirnos aprender muchas cosas nuevas, a seguir formándonos continuamente. No es algo negociable.

Aprende a ser profesor de lo importante

¿Recuerdas el momento más feliz de tu vida escolar? ¿Qué situación te impactó más? ¿De quién y dónde aprendiste las dos cosas más importantes? ¿Qué profesor/a fue más influyente en tu vida o cambió más tu manera de ver las cosas? Mira hacia atrás...después de recorrer todo el camino de estudiante ¿qué cosas han merecido la pena?

Como profesor me hago esas preguntas, para priorizar mis objetivos, teniendo presente que hacer algo intrascendente bien, no lo convierte en importante.

¿Somos profesores de una asignatura o profesores de lo importante?

Nuestro trabajo de profesores no es enseñar asignaturas, es enseñar a los alumnos a entender el mundo desde un punto de vista de nuestra asignatura. Y para ello necesitamos conectar con ellos, necesitamos su entusisasmo, su compromiso, necesitamos serles de inspiración. Porque nuestra tarea prioritaria no es enseñarles contenidos, sino AUMENTAR SU CAPACIDAD E INTERES POR APRENDER.

No sabemos los conocimientos que se necesitarán en el futuro. Pero sí sabemos qué tipo de competencias/capacidades y qué perfil de persona será adecuado para ese futuro: hábitos como aprender leyendo o viendo videos, localizar y dejarse enseñar por profesionales, poner en marcha proyectos, aprender a expresarse, y otras capacidades básicas son mucho más importantes que memorizar contenidos. Y además esas habilidades y capacidades básicas nunca se olvidan al contrario de los contenidos que se memorizan.

LA EDUCACION FISICA: EL MEJOR ENTORNO PARA APRENDER A PENSAR

El objetivo de este método didáctico es que los alumnos adquieran el hábito de observar una situación y luego identificar lo que no funciona bien, para, posteriormente, aportar soluciones que mejoren la situación.

De forma muy resumida, los pasos a dar en cada sesión (es aplicable a casi cualquier tipo de contenido) son:

1. Fijamos un objetivo de aprendizaje.
2. Proponemos un ejercicio o actividad para conseguir ese objetivo.
3. Avisamos a los estudiantes que el ejercicio propuesto no es perfecto, no es el mejor: TIENE FALLOS Y SE PUEDE MEJORAR.
4. Los estudiantes practican el ejercicio durante 10/15 minutos, observando críticamente qué no funciona, qué problemas surgen, qué tendríamos que mejorar…
5. Reunión de estudiantes y profesor: se ponen en común los errores observados y los estudiantes aportan variaciones sobre el ejercicio original que puedan resolver esos problemas. se discute que pasará si realizamos los cambios propuestos.
6. Probamos si funciona las propuestas y mejoran los resultados.
7. Repetir el proceso.

 

CAPACIDADES Y COMPETENCIAS BASICAS QUE ESTAMOS TRABAJANDO CUANDO UTILIZAMOS ESTA METODOLOGÍA:

1. La observación fina: priorizar la búsqueda de fallos, de problemas, de lo que no funciona.
2. Habituarnos a dedicar unos minutos a pensar: "pensar es util" porque mejora las cosas.
3. Creatividad: búsqueda de soluciones, alternativas, posibilidades..
4. Coger el hábito vital de observar y buscar lo que no funciona para mejorarlo: en la vida deportiva, personal, social,…
5. Acostumbrar a los alumnos a reflexionar y especular sobre “lo que pasará si”, sobre otras formas de hacer cada cosa, sobre otras opciones y oportunidades: qué resultados tendremos si elegimos otro camino. 

Aprender a pensar eficazmente

En la vida real es esencial pensar eficazmente. Y para pensar eficazmente tendrás que practicar estas competencias....

priorizar, defender, verificar, inventar, relacionar, pensar lateralmente, evaluar, concluir, decidir, criticar, recomendar, hacer informes, seleccionar, debatir, crear, producir, encuentra la manera de, re-organiza, hipotetiza, haz previsiones, adelanta consecuencias, imagina, explica,  diseña, parafrasea, sumariza, infiere, asocia, encuentra utilidades alternativas, localiza información, explica e interpreta una frase, modifica y expande una idea, simulaproyectos e ideas, inicia proyectos, sube a la web, enseña, deconstruye y analiza partes, secuencia, infiere, saca diferencias y contrastes, maneja estadisticas, agregar funcionalidades a cosas o ideas...

Y divertirte con actividades como

hacer videos, hacer presentaciones multimedia,  crear podcast, organizar eventos, montar un blog, rapear, inventar juegos, hacer guiones, hacer mezclas, cantar, dibujar comics,  organizar una TV o una radio, escribir tu biografia, vender tus ideas, divulgar y hacer marketing sobre lo que haces, haz entrevistas, organiza un concurso de mini-presentaciones, escribe criticas de libros y peliculas, haz teatro, discusiones de rol cambiando de personaje, haz listados de ideas interesantes, haz mapas mentales, resalta y on flechas, reconfigura, organiza y establece links, haz de periodista, monta tu blog y tu red, suscribete, conectatea otras redes, googlea, haz listados de favoritos que te aporten valor, crea multimedia, maneja hojas de cálculo, haz un cuestionario, haz diagramas, haz caricaturas y tiras cómicas dibujos sencillos, entiende los graficos, fotografía, haz rompecabezas,  lleva un diario, recolecta y clasifica información que te interese, mapea, haz portafolios de  tus trabajos,

13 competencias para el siglo XXI

1. Saber pensar eficazmente: buscar información y utilizarla para elaborar las estrategias con las que conseguire los objetivos.

2. Comunicación: ser capaz de hacer presentaciones eficaces a diferentes tipos de personas.

3. Aprender a utilizar los medios de comunicación masiva para crear oportunidades.

4. Pensamiento lateral y creativo, para relacionar las cosas de forma diferente.

5. Saber escuchar y buscar ayuda: cómo los demás pueden ayudarte a resolver problemas, planificar, diseñar estrategias...

6. Saber utilizar el tiempo: planificar, idear oportunidades y estrategias, organizarse.

7. Perseverancia: hay que dedicar 10.000 horas para ser muy bueno en cualquier tema.

8. Saber negociar y sacar lo mejor de los demás.

9. Hacer una buena red personal, utilizar tu blog para aportar valor...

10. Ser capaz de leer libros, de acercarse al que sabe hacer lo que quiero aprender: aprender a aprender.

11. Poseer energia pasión y entusiasmo.

12. Empatía: saber dar lo mejor de uno mismo para que los demás correspondan con lo mejor que pueden ofrecerte.

13. Perder el miedo a equivocarse y saber aprender de los errores.

Profesor de vacaciones...

Si te fijas llevo una mochila...una mochila con unos cuantos libros y muchas ganas de estar al día, de saber cómo funciona el mundo, si ese que está  fuera de mi asignatura. Esta playa, como cualquier otro sitio, es un buen lugar para leer y mejorar mi desempeño profesional.

Esto era un bloque de mármol y a alguien le pareció buena idea mejorarlo

A veces si tienes el talento de quitar lo que sobra, haces algo con infinito valor: Miguel Angel lo hizo.

Me pregunto por qué los profesores no imitamos a Miguel Angel y reducimos los contenidos de la programación para poder trabajarlos en profundidad, enseñando a nuestros estudiantes a pensar eficazmente y con tiempo para desarrollar capacidades básicas. Y de paso liberamos un poco de tiempo para trabajar CONTENIDOS REALMENTE IMPORTANTES, enfocados desde nuestra asignatura.

La sociedad del conocimiento necesita un perfil diferente de profesor

14 cosas que alguien tendría que haberme dicho cuando era estudiante

 

1. A la hora de estudiar en la Universidad:

   Uno. Si tienes vocación y dinero, estudia sólo lo suficiente para aprobar,  y dedica tu energía a proyectos (trabaja tu iniciativa y ponlos en marcha tú) que te emocionen. Haz postgrados interesantes que añadan valor a tu título y te especialicen, varios.

      Dos. Si no tienes dinero y tienes vocación, focalizate en cómo mejorar tus competencias básicas: mejora tu eficacia al comunicarte (tira de video y grábate mil veces explicando lo que sea), practica cómo formar equipos interesados en temas que te resulten "chulos", aprende técnicas para negociar, cómo hacer una presentación impactante, lee manuales de cómo caer bien a otras personas….Hay muy buenos libros divulgativos sobre todo eso.

2. Cultivar tu red de contactos es fundamental: te ayudará a conseguir trabajos. Por eso, es prioritario hacerte visible en la Facultad. La mejor forma de que conozcan es organizar actividades: monta la tv de la Fac, organiza un concierto, pon en marcha una ONG, una protesta, una campaña publicitaria para pedir lo que necesita tu colectivo... Haz un mapa de amistades, ten al día tu agenda y centrate en mantener el contacto: organiza reuniones periódicas de tu promoción. Porque cuando empieces a trabajar ese club de amigos tirarán de ti. El mercado laboral es invisible, subterráneo, injusto, basado en contactos y muy difícil de atacar desde fuera. Una vez “dentro” es todo más sencillo.

3. Cuando termines, rodéate de gente de tu profesión (te mantendrán informado desde “dentro”) PERO NO SOLO DE ELLOS, que para eso existe una cosa llamada Twitter.

4. Enseguida descubrirás que la carrera no es lo que necesitas como profesional, pero no importa: que los estudios no sean de calidad te va a beneficiar: así podrás trabajar tus competencias y capacidades básicas (Soft Skills, que dicen los americanos) que te darán una ventaja competitiva para con tus colegas: se trata de diferenciarte añadiendo valor a lo que sabes hacer.

5. Haces bien despachando tus estudios sin matarte por buenas notas. Lo que quieres es ser un buen profesional, no ser un buen estudiante. Añade valor a tu currículo metiéndote y desarrollando proyectos interesantes que tengan que ver con lo tuyo. La idea es, ya lo vimos antes, diferenciarte y ofrecer a quien vaya a contratarte una ventaja comparativa en relación a tus compañeros de fac.

6. Si quieres jugar en la 1ª división aprovecha el tiempo leyendo libros y blogs, escucha podcast, curioseando en periódicos, habla con gente interesante sobre proyectos interesantes: intenta viajar, ver cosas diferentes, leer, escribir… convertirte en una persona interesante, que diga cosas interesantes.

7. Dedica tu tiempo de lectura en libros para aprender.

8. Si los proyectos en que te metes te quitan tanto tiempo que CASI no terminas la carrera, vas por el buen camino. 

9. Claro que hay que aprender inglés, pero aprovecha para hacer prácticas en proyectos o empresas. Hay muchas formar creativas para mejorar tu inglés: haz el Camino de Santiago con angloparlantes, haz un contacto nativo en tu ciudad y cuida sus niños, ofrece servicios gratuitos para guiar a turistas en lengua inglesa, recibe anglo-invitados ... Como siempre, utiliza tu imaginación.

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....y cuando ya tengas tu título universitario...

10. Ten una visión en conjunto de tu carrera: hay buenos libros divulgativos que te la dan, pero hay otros que son muy malos: tienes que haber aprendido lo suficiente para distinguirlos. Tambien puedes dejarte aconsejar por gente con más criterio: ponte en contacto con profesionales interesantes que te den consejos sobre lecturas y blogs. Es mejor trabajar en cosas interesantes, que te den autonomia o que te dejen tiempo para ti, aceptando cobrar la mitad. Será una de las mejores decisiones de tu vida.

11. Escribe a los jefes. Hasta que consigamos cambiarlo, son los jefes los que dan y quitan trabajo. Aprovecha que se aburren como todo el mundo y mándales un correo o una carta de presentación con ideas diferentes, creativas e interesantes. Si necesitas trabajo, pídeselo, aunque sean casi desconocidos. Nunca minusvalores ni su vanidad ni su necesidad de hacer una buena acción o una locura de vez en cuando. Cuando hables con ellos toca temas esenciales: ¿cuál ha sido el momento más feliz de su vida? ¿ Que hecho le impactó más cuando era niño? y cosas así...

12. Lee y escribe. Desconfía de aquellos a los que no les gusta ni leer ni escribir y dicen que da igual: lo único que están es ....perdidos. El único camino para mantener en forma tu máquina de pensar y sentir (tu cerebro) es leyendo libros interesantes.

13. Escribe en tu un blog. No desperdicies la máquina de contactos que es internet. El trabajo de tu vida puede que lo consigas por ahí.

14. Tienes que se un poco japonés: junta las palmas de tus manos, sonrie, y baja amablemente la cabeza para indicar que valoras por encima de todas las cosas a la gente.

DECALOGO PARA UN TRIPLE SALTO MORTAL.

“Tenemos que dar un triple salto mortal y cambiar la forma de enseñar”. Oscar GBusto, jueves 21 enero 2016

En qué ideas basar esa revolución educativa? Propongo algunas ...

 1. Los estudiantes no vienen a aprender contenidos sino a recibir inspiración y energía.

 2. Plantéales proyectos que cambien su manera de ver el mundo, que influyan en su vida, en lo que hacen, en cómo abordan los problemas…

 3. No pierdas tiempo en enseñar lo que se olvida: los contenidos se olvidan de forma masiva; por el contrario, las competencias nunca se olvidan. Focaliza en aprender “haciendo”.

 4. Cuida tu poder de influencia sobre los estudiantes: sólo así podrás darles lo que no encontraran en Google: inspiración.

 5. No les prives del placer de encontrar “las respuestas a las preguntas” o “las soluciones a los problemas”: no hables más de la cuenta. Céntrate en hacer buenas preguntas. No vienes a lucirte, a demostrar lo que sabes y lo bien que lo explicas. Estás ahí para indicarles hacia donde tienen que avanzar, para que aprendan a hacerse preguntas significativas.

 6. Tienen que aprender lo esencial de “tu” área de conocimiento, pero recuerda que quizá sea más importante lo transversal, las competencias básicas.

 7. Reduce los “contenidos específicos de tu asignatura”  a la mitad de la mitad y trabájalos en profundidad y por proyectos que conecten distintas áreas de conocimiento. No te centres exclusivamente en los contenidos de “tu” programación: “no eres profesor de matemáticas” eres PROFESOR: no debes ser un especialista si no un intelectual que señala lo importante (esté o no en tu programación).

 8. Prioriza las competencias generales, y recuerda que la competencia más importante es saber pensar eficazmente (no es algo que muchos adultos sepan hacer, por cierto). La siguiente prioridad es aprender a valorar la lectura, no como entretenimiento (disfrutar del arte), si no como forma de acceder a nuevas ideas y oportunidades, que te ayuden a plantearte nuevas posibilidades para hacer.

 9. Convénceles de lo importante que es que los estudiantes se impliquen en su proceso de aprendizaje. Los estudiantes deben tomar la iniciativa y averiguar lo que la escuela no les dará, e informarse de cómo completar esa formación “oficial”, haciendo cursos por Internet, juntándose a compañeros para hacer proyectos por la tarde al margen de la escuela,…

 10.  …ahora te toca a ti: completa este último punto….

 

 

Competencias para el siglo XXI

En el excelente  libro de Bernie Trilling y Charles “21st Century Skills: learning for life in our times” En este libro Bernie Trilling y Charles Fadel plantean cuales deben ser las competencias y habilidades que deben desarrollar los aprendices de hoy, para tener éxito en los trabajos del siglo XXI.

Los profesores debemos ofrecer una educación que permita al alumnado ejercitar mediante indagaciones y proyectos esas competencias y practicar mediante experiencias educativas apropiadas aquellos procesos cognitivos que lleva a cabo un profesional del siglo XXI inteligente y experto.

Este libro que ha sido un gran éxito de ventas en países donde existe preocupación por mejorar la educación también ha sido traducido a otras lenguas de países no angloparlantes que tienen un fuerte sentido de proyecto-nación y son conocedores de la importancia estratégica de la educación sobre el futuro de sus naciones: está traducido al Ruso y al Coreano.

En cualquier caso es muy sintomático que este gran libro no haya sido traducido al castellano. Es una historia que se repite con otros libros sobre educación: los encuentras antes traducidos al árabe que al español.  Es muy triste que en tiempos de Alfonso X el sabio España fuese el lugar donde se traducían las obras clásicas Griegas  desde el  Árabe a otras lenguas y ahora no seamos siquiera capaces de traducir a nuestro propio idioma, joyas que pueden ayudarnos a dar forma a un futuro mejor.

 

La educación que hoy parece imposible será realidad en un futuro

La película "The wind raises" explica las analogías entre la evolución de la aviación y la educación: lo que hoy parece imposible será realidad en un futuro. De hecho, lo que hoy nos parece evidente, normal y rutinario en otros tiempos parecía imposible a la inmensa mayoría y sólo lo veían posible, los escasos e incomprendidos visionarios. Las aeronaves fueron mejorando para poder transportar a más pasajeros, más lejos y en menos tiempo y en condiciones de más seguridad (y hasta más baratos).

El necesario cambio en educación, que a algunos nos parece tan imposible de lograr, posiblemente sea realizable si es que alguien lo intenta con nuevas ideas, nuevas tecnologías y la energía necesaria. La idea es que la misma transformación que hicimos en el pasado con la aviación la podemos hacer ahora mismo con la educación si depositamos en ello la fe y la energía necesaria: logros que actualmente parecen imposibles con las metodologías tradicionales (y medievales) de enseñanza serán perfectamente posibles y hasta rutinarios con combinaciones de metodologías mejoradas como la pedagogía inversa, las metodologías inductivas (indagación y proyectos), la enseñanza justo a tiempo y la gamificación. 

Decálogo del estudiante del Perez Ayala

Soy estudiante del Perez Ayala y por eso:

1. Aprendo a automotivarme, pero lo que más me ayuda es que los profes valoren, conociendo mis defectos, las cosas buenas que hay en mi.

2. Controlo mis impulsos: lo que decido y hago tiene consecuencias: con lo importante es mejor saber aplazar las recompensas.

3. Intento jugar bien mis cartas, y sacar máximo provecho de mis capacidades y oportunidades.

4. No dejo las cosas para otro día: “calentar la silla” y trabajar duro es importante.

5. Acepto las críticas justas.

6. Aprendo a gestionar mis emociones y desarrollo capacidades super-importantes como la tenacidad, el esfuerzo y la resistencia a la frustración.

7. Me gusta que me evalúen  no en función del modelo de éxito estrecho (conocimientos) sino por la capacidad de identificar y cultivar mis habilidades y talentos.

8. Doy mucha importancia a mis proyectos y sueños: dar sentido a mi futuro con ellos es la mejor manera de demostrar mi inteligencia.

9. Me gusta tener mi inteligencia alerta, dispuesta a sacar enseñanzas de lo que vivo.

10. Prefiero educarme en la posibilidad: imaginar algo que no existe y que puedo hacer que exista. Leí en un libro que "la función del cerebro no es procesar información si no generar expectativas y posibilidades". Me convence.